Hadi Matar, acusado formalmente del intento de asesinato de Salman Rushdie

Hadi Matar, acusado formalmente del intento de asesinato de Salman Rushdie

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El estadounidense Hadi Matar, de 24 años e hijo de inmigrantes libaneses, ha sido formalmente acusado de intento de asesinato por el apuñalamiento del escritor Salman Rushdie. Las autoridades de Estados Unidos mantienen un estricto silencio acerca de Matar, aunque su ‘rastro’ en redes sociales le muestra como un extremista musulmán y simpatizante de los Guardianes de la Revolución de Irán, la fuerza militar de élite de ese país, mucho más ideologizada y alineada con el integrismo islámico que las Fuerzas Armadas iraníes.

Hadi Matar se declaró «no culpable» de «intento de asesinato» ante un juzgado del estado de Nueva York.

Ésa es la información transmitida por los medios de comunicación de ese país. Las autoridades policiales del estado de Nueva York, en el que tuvo lugar la agresión, no han establecido la posible motivación de la acción e insisten en que la investigación está en curso. La República Islámica de Irán ofrece una recompensa de tres millones de dólares (2,9 millones de euros) para quien asesine a Rushdie debido a su novela ‘Los versos satánicos’, publicada hace 33 años, y que el entonces líder de ese país, el ayatolá Ruholá Jomeini, calificó de «blasfema».

Por el momento no hay ninguna información oficial que establezca una vinculación entre la salvaje agresión a Rushdie y la condena a muerte de Jomeini, que sigue plenamente en vigor y cuya recompensa fue elevada en 600.000 dólares (585.000 euros) hace seis años. Pero las simpatías de Matar por los Guardianes de la Revolución y por el chiísmo radical -que es la versión del Islam dominante en Irán – apuntan a una posible motivación religiosa.

El intento de asesinato a Rushdie ha llegado justo un día después de que la Justicia de Estados Unidos procesara a un miembro de los Guardianes de la Revolución por ofrecer 300.000 dólares (290.000 euros) por el asesinato del ex consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump, John Bolton, y del secretario de Estado con el mismo presidente, Mike Pompeo. También tiene lugar en el momento en el que EEUU e Irán siguen negociando un acuerdo nuclear para que ese último país renuncie por una o dos décadas a la fabricación de bombas atómicas a cambio de garantías de seguridad de Washington.

Pese a esas coincidencias geopolíticas, no parece que Matar, en el caso de que actuara llevado por el fanatismo, formará parte de un complot. Al contrario, su perfil parece más bien el de un fanático que se radicalizó él solo, es decir, como lo que se suele calificar de ‘lobo solitario‘, aunque comparar a un asesino extremista con un lobo es insultante para el animal. Nació en California, y llevaba poco tiempo residiendo en Bergen, una ciudad situada en las afueras de Nueva York, justo enfrente de la isla de Manhattan. Se ha declarado «no culpable» por un delito que podría costarle hasta 25 años de cárcel. Poco más es lo que se sabe de él, dejando de lado que su permiso de conducir era falso.

Las autoridades también mantienen un muro de silencio acerca del estado de salud de Rushdie. No hay ninguna información oficial sobre las heridas que sufrió el escritor, ni tampoco sobre las secuelas que sufrió a consecuencia del atentado o sobre el peligro de que fallezca. Sin embargo, el agente de Rushdie, Andrew Wylie, ha transmitido a medios estadounidenses que el escritor ya no necesita un respirador y que puede hablar..

Wylie había explicado el viernes que el estado de Rushdie «no es bueno». El escritor había recibido al menos una puñalada en el hígado, un órgano vital, y otra en la garganta. Rushdie tenía seccionados los nervios de un brazo, y podría perder la visión de un ojo. De acuerdo con otras informaciones citadas por los medios de comunicación, Matar habría apuñalado siete u ocho veces al autor de los ‘Los versos satánicos’.

El intento de asesinato ha desencadenado una oleada de condenas a nivel mundial. El consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, lo ha calificado de «horroroso»; el primer ministro británico, Boris Johnson, ha declarado que «desde hace 33 años, Rushdie encarna la libertad y la lucha contra el oscurantismo»; y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo estar «horrorizado» por el ataque. La directora del capítulo estadounidense del PEN Club – una organización de defensa de los escritores en todos el mundo – recordó el viernes que pocas horas antes de sufrir el ataque, Rushdie le había escrito «para ayudar con el alojamiento de los escritores ucranianos» que han huido de la invasión rusa de ese país.

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