El nuevo Gobierno de Macron empieza su andadura con un ministro acusado de violador

«Este gobierno es, ante todo, un gobierno para actuar», ha dicho este lunes Emmanuel Macron , poco antes de que arrancara su primer Consejo de Ministros. El presidente francés pretendía que éste sirviera para poner de manifiesto sus prioridades de cara a las elecciones legislativas de junio, pero el verdadero protagonista de este lunes en el Elíseo es Damien Abad, el nuevo ministro de Solidaridades. Abad, que había ocupado hasta la fecha el cargo de presidente de Los Republicanos (conservadores) en la Asamblea Nacional francesa ha sido acusado, por dos mujeres, de violación.
El periódico de investigación Mediapart reveló el testimonio de las denunciantes el pasado sábado. Chloe (nombre ficticio), de 41 años, conoció a Abad en 2010, durante la boda de unos amigos en común. Sentados en la misma mesa, charlan y, según el recito de la mujer, él empieza a ser «un poco insistente». Abad trata de quedar con ella en varias ocasiones, ella declina la oferta, pero tiempo después, acepta quedar a tomar algo. Se encuentran en un bar de París, ella recuerda haberse bebido una copa de champán y luego despertarse a la mañana siguiente en una habitación de hotel, en ropa interior y con la sensación de haber sido drogada. «Mi cuerpo estaba como dormido y doloroso», relata Chloe al periódico citado, añadiendo que tardó varios meses en admitir que «lo había ocurrido era una violación» y que durante años vivió con «angustia», incapaz de superarlo.
El otro testimonio recogido por Mediapart es el de Margaux, de 35 años, que llegó a denunciar al ahora ministro por violación en 2017. Los hechos se remontan a 2010. Tras conocerse, ambos empezaron a ligar por mensajes, pero los de él fueron subiendo de tono e insistencia. Finalmente, una noche quedan a cenar y mantienen una relación sexual, consentida en principio pero, cuando la mujer quiere ponerle fin porque él se vuelve insistente y algo violento, Abad la fuerza (según el relato de Margaux). La denuncia por violación fue archivada, pero el Observatorio de las Violencias Sexistas y Sexuales asegura que previno de las alegaciones de ambas mujeres tanto al Partido de Abad, Los Republicanos, como a La República en Marcha, la formación liderada por Macron. No obtuvo ninguna respuesta.
El ahora ministro de Solidaridades reaccionó el pasado fin de semana rechazando todas las alegaciones. Afirma que es imposible debido a su «minusvalía». Abad está diagnosticado con artrogriposis, una enfermedad congénita que afecta a las articulaciones y la movilidad.
«Voy a ser muy clara. Sobre todos estos temas de acoso, de agresiones sexuales, no puede haber ninguna impunidad», señaló el pasado fin de semana la primera ministra Elisabeth Borne, sin que el propio Macron se haya manifestado al respecto.
El caso abre la cuestión de qué deben hacer los partidos cuando se denuncian casos de abusos sexuales. Precisamente, el periodista Taha Bouhafs retiró hace algunos días su candidatura a las legislativas por el partido Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon, tras ser acusado por varias mujeres de «agresión sexual».
Sorprendentemente (o tal vez no), uno de los pocos que ha salido en defensa de Abad, ha sido Eric Zemmour, ex candidato ultraderechista al Elíseo y, también él, acusado de abusos sexuales. «Estoy a favor del respeto de la presunción de inocencia», ha manifestado en una entrevista.