Cellnex se abre a socios pero evita ampliar capital en su intento por controlar las 40.000 torres de Deutsche Telekom

El gigante alemán vende 40.600 infraestructuras por alrededor de 18.000 millones de euros. La compañía española, presente en 12 países del continente, rivaliza con American Tower o Vantage por comprarlas. Leer

Cellnex se abre a socios pero evita ampliar capital en su intento por controlar las 40.000 torres de Deutsche Telekom

El gigante alemán vende 40.600 infraestructuras por alrededor de 18.000 millones de euros. La compañía española, presente en 12 países del continente, rivaliza con American Tower o Vantage por comprarlas. Leer

Cellnex se abre a la entrada de un socio para la compra de las las torres de telecomunicaciones de Deutsche Telekom en Alemania, la operación más apetitosa en el continente para el sector de las infraestructuras de telecomunicaciones. «Entendemos la importancia de estar en Alemania y tenemos interés en estar», ha reconocido Tobías Martínez, consejero delegado de la compañía española, quien asegura que en su empresa están «entusiasmados» con la oportunidad de entrar en ese gran mercado.

«Nunca estamos cerrados a la entrada de un socio», ha afirmado Martínez, «cuando son necesarios y aportan valor al proyecto, no sólo dinero», ha manifestado en un encuentro con medios previo a la Junta General de Accionistas que la firma ha celebrado este miércoles. Sin embargo, el ejecutivo descarta en principio una ampliación de capital a la hora de abordar esa compra.

El operador alemán ha puesto a la venta sus 40.600 torres por una cifra que en el sector se estima en torno a 18.000 millones de euros. Se prevé el interés por la operación tanto de de Vantage, vinculada a Vodafone, como de American Tower Corporation (ATC), que ha reforzado su posición en Europa gracias a la venta de torres de Telxius por parte de Telefónica, en una operación de 7.700 millones de euros. Cellnex está preparado para irrumpir definitivamente en el mercado alemán, uno de los claros dentro del bosque de torres del que dispone en Europa, con más de 100.000 puntos en los que ejerce de operador neutral e independiente de infraestructuras. La compañía está presente en una docena de mercados del continente, con una presencia especialmente acentuada en España y, en menor medida y por este orden, Polonia, Reino Unido, Francia e Italia. Las torres a la venta se encuentran principalmente en Alemania (aproximadamente 33.000), más una porción en Austria (de alrededor de 7.000), donde Cellnex sí compite aunque de momento de forma residual.

A Deutsche Telekom se le presupone una venta del total de sus infraestructuras o una permanencia accionarial que no sea de control y que algunos analistas estiman entre el 25% y el 49% del futuro accionariado. Cellnex, por su parte, siempre ha mostrado en sus operaciones una voluntad de ejercer de socio de control, por encima del 50%, de manera que encajaría para esta operación la permanencia del gigante germano en el proyecto como minoritario y la irrupción de Cellnex como mayoritario, siempre que la oferta de la empresa española resulte más atractiva que otras como la que pueda presentar American Tower. Según lo expuesto por la escisión de Abertis, existe también la posibilidad de que un socio la acompañe en esta adquisición, lo que rebajaría considerablemente la cantidad a abonar en un escenario de subida de tipos de interés.

La deuda neta de la empresa, de 13.600 millones tras un largo ciclo de compras, a día de hoy responde en un 87% a condiciones de financiación de tipo fijo, pero la política monetaria ya es otra a la espera a de una subida de tipos por parte del BCE, lo que afectaría a los endeudamientos futuros. No obstante, Bertrand Kan, presidente de Cellnex, está convencido de que en la compañía se encuentran «protegidos» frente a ese endurecimiento crediticio y también ante la fuerte inflación, entre otras razones gracias a los contratos, «muy a largo plazo, por 20 o 30 años», que fundamentan su negocio como operador neutral e independiente en colaboración con las telefónicas. Martínez apuntó que «la vida media media de los bonos emitidos está entre seis y siete años» para Cellnex. Preguntados al respecto por EL MUNDO, tanto Kan como Martínez destacaron que Cellnex tiene más fácil financiarse actualmente que en sus orígenes, dada la magnitud que ha tomado una compañía con una capitalización bursátil que hoy día supera los 30.000 millones de euros. A 31 de marzo, Cellnex aglutinaba 102.712 emplazamientos operativos en Europa, a los que habría que sumar los 22.575 previstos para su despliegue antes de 2030 y las operaciones que ya ha pactado Cellnex pero aún están pendientes de cierre.

Martínez ha respondido además sobre la consolidación iniciada por Orange y MásMóvil para el mercado español, que provocaría la reducción del plantel de grandes operadores de telefonía a sólo tres: el fusionado, Telefónica y Vodafone. Mientras tanto, habría cuatro operadores de infraestructuras, entre los que a alguno «no le van a salir los números» por desaparecer uno de los principales clientes del sector. «Posiblemente acabe en tres operadores y cuatro compañías de infraestructuras. ¿Tiene sentido? ¿No tiene sentido? Difícilmente tiene sentido», ha manifestado el consejero delegado en referencia a la competencia de Cellnex: American Tower, Vantage (spin off de Vodafone) y Totem (proyecto propiedad de Orange focalizado en España y Francia).