Bruselas da dos meses a Reino Unido para rectificar antes de ir al Tribunal de Justicia de la UE

Bruselas da dos meses a Reino Unido para rectificar antes de ir al Tribunal de Justicia de la UE

Reino Unido Johnson desafía a la UE y ‘reescribe’ el Protocolo de Irlanda

La Comisión Europea ha anunciado este miércoles el lanzamiento de dos nuevos procedimientos de infracción contra Reino Unido por incumplir «partes significativas del Protocolo sobre Irlanda/Irlanda del Norte», el mecanismo aprobado en el Acuerdo de Salida del Brexit para garantizar que no haya fronteras duras entre ambos territorios y garantizar los Acuerdos de Paz de Viernes Santo. «A pesar de los repetidos llamamientos al Gobierno del Reino Unido para implementar el Protocolo, no lo ha hecho. Esto es una clara violación del derecho internacional. El objetivo de estos procedimientos de infracción es restablecer el cumplimiento del Protocolo en una serie de áreas clave en las que el Reino Unido no lo ha estado implementando correctamente, y en última instancia, proteger la salud y la seguridad de los ciudadanos de la UE», ha explicado el vicepresidente Maros Sefcovic este mediodía en Bruselas.

El lunes, cuando la ministra Liz Truss hizo público su paquete legislativo para cargarse unilateralmente el protocolo negociado durante muchos meses, Sefcovic avisó de que habría respuestas legales. La primera, reactivar el procedimiento de infracción que arrancó en 2021 por incumplir los requerimientos de certificados fitosanitarios, pero que después se paralizó como muestra de buena voluntad. Hoy, la Comisión lanza dos más, amenazando con acudir al Tribunal de Justicia de la UE si en dos meses no hay cambio de postura en Londres.

Es de momento, la respuesta suave. No hay réplicas comerciales, pues la UE podría paralizar el acuerdo comercial entre ambas partes firmado tras el Brexit y que jurídica y políticamente está vinculado al Acuerdo de Salida y a la existencia de ese Protocolo, que establece controles aduaneros, fiscales y fitosanitarios en la región. Menos que si no hubiera acuerdo, y controles burocráticos que la UE aceptó rebajar sensiblemente el pasado mes de octubre, pero controles. Bruselas no opta por esa escalada de momento, pero todo dependerá de Boris Johnson, que desde su llegada al poder ha incumplido una y otra vez sus compromisos.

Al mismo tiempo, la Comisión ha hecho públicos hoy detalles adicionales sobre las posibles soluciones que presentó en octubre de 2021 para facilitar la circulación de mercancías entre Gran Bretaña e Irlanda del Norte. «Los documentos de posición publicados hoy explican cómo se puede facilitar significativamente el movimiento de mercancías entre Gran Bretaña e Irlanda del Norte. La Comisión pide al Gobierno del Reino Unido que se comprometa de manera seria y constructiva con estas soluciones sugeridas. Como de costumbre, la Comisión procederá en estrecha colaboración y diálogo constante con el Parlamento Europeo y el Consejo», dice el comunicado de la institución comunitaria.

Según los ejemplos ofrecidos, con esos cambios y reducción de carga burocrática, un camión de mercancías que se traslade desde un almacén de Sainsburys en el Reino Unido a una sucursal en Irlanda del Norte solo necesitaría tres páginas de documentación administrativa. La mayoría de los operadores irlandeses y de Irlanda del Norte quieren más facilidades, pero admiten que tras los primeros meses de caos y problemas se han adaptado razonablemente a los requisitos. Querrían menos, pero nadie quería una medida unilateral que ponga en peligro la situación actual. La legislación británica da permiso a sus ministros para ignorar prácticamente todas las exigencias legales pactadas. Y eso daría, según denuncia Bruselas, la autoridad a un ministro británico de decidir en la práctica qué puede entrar y qué no en el mercado comunitario.

La UE no está respondiendo con demasiada fuerza y se declara dispuesta a volver a la mesa mañana mismo. Creen que es mejor que los británicos hagan el ridículo internacional y se cuezan en su propio caldo y no escalar inmediatamente porque los ciudadanos saldrían perdiendo. «¿Cómo van a mirar a Reino Unido sus otros socios internacionales a la hora de negociar con ellos? ¿Lo van a respetar? Son preguntas a las que van a tener que responder, así que lo mejor es que volvamos al terreno seguro y respetemos loa tratados y el derecho internacional», ha instado el vicepresidente Sefcovic en una comparecencia en Bruselas.

Abrir un procedimiento de infracción a un país que ya no es miembro es, quizás, más simbólico que otra cosa. EL TJUE sigue siendo el órgano pactado para dirimir cuestiones, pero un Ejecutivo que se salta la legalidad no estará muy preocupado por un órgano del que quiere prescindir. «El efecto del Protocolo es que las reglas de mercado único se aplican en Irlanda del Norte. El único tribunal competente para interpretar esas leyes en beneficio de los operadores en UE e Irlanda es el TJUE. Eliminar el papel del TJUE está fuera de cuestión, sería declarado ilegal por el propio TJUE, no tiene sentido ni intentarlo», explican en la Unión

Las nuevas infracciones son también por incumplir reglas sanitarias y fitosanitarias y no dotar de los recursos suficientes, necesarios y pactados para hacer los controles en los puertos, algo que este periódico constató en persona en Belfast. Trabajan en barracones no acondicionados y con riesgos diarios para su seguridad. «Reino Unido no lleva a cabo los controles ni dota de personal los puntos de control. No proporciona a UE datos estadísticos de comercio de Irlanda del Norte, lo que fuerza a que todo se sostenga por buena fe», denuncian, avisando que hay pruebas de contrabando a gran escala en la zona, rompiendo cada día la integridad del mercado único.

Además, la UE lamenta que no ha habido negociaciones de verdad desde febrero para buscar soluciones prácticas. «Reino Unido ha roto los términos del periodo de tregua, de la transición, por eso no puede sorprender a nadie los expedientes», lamentan fuentes comunitarias. «Propusimos un calendario desde febrero pero Reino Unido no nos hizo caso, nos gustaría volver al trabajo», añaden esas fuentes.